Se inició en la actividad pesquera en 1968, al adquirir los activos de la empresa Estatal “Industria Pesquera de Oaxaca”, y desde entonces se volvió una figura importante en el desarrollo de la pesca en México.
En 1980 fue invitado por el Gobierno Federal a participar en la incipiente Industria atunera, y para eso mandó a construir en España los primeros buques a través de la empresa Maratún, S.A. de C.V.
En 1982, al terminar la construcción de sus buques, la flota atunera se encontraba semiparalizada debido al embargo atunero decretado por Estados Unidos en contra del atún mexicano. Dicha situación política llevó a Don Antonio Suárez a enviar sus buques de pesca al Océano Atlántico.
En 1984, ya con la experiencia adquirida y a la vez conocedor del mercado europeo, trajo de regreso sus barcos a México poniendo su base en el puerto de Ensenada, Baja California y abrió las exportaciones del atún mexicano hacia Europa.
Al mismo tiempo, constituye la Asociación Mexicana de Productores de Atún, A.C., la cual preside, y logra que la industria se libre de la presión del embargo atunero impuesto por Estados Unidos.
Maratún fue incrementando de forma significativa su flota mediante diversas asociaciones y adquisiciones, y para 1988 ya era considerada la más grande armadora de buques atuneros del mundo. Operatún S.A. de C.V., empresa integrante del mismo grupo, se encargó de la operación.
En 1990 se impone un segundo embargo por parte de Estados Unidos y como consecuencia, el Grupo tuvo que deshacerse de una gran parte de su flota y decidió integrarse de forma vertical constituyendo para ello la empresa Marindustrias. Adquirió mediante un crédito del Banco de Comercio Exterior unas grandes instalaciones pesqueras en el puerto de Manzanillo, el más importante de México.